El tema inicial de nuestros capítulos es el Kohén, sus características y obligaciones, privilegios y tareas. Los Kohanim, miembros de la tribu de Leví, son los descendientes de Aharón –hermano de Moshé Rabenu– quienes fueron seleccionados como los líderes espirituales del pueblo hebreo. Sus tareas incluían el servicio diario de los Korbanot y la transmisión de las leyes e instructivos Divinos. Mientras que Moshé se mostraba un tanto alejado del pueblo, su hermano Aharón logró establecer un diálogo directo con las multitudes.
Por ejemplo, cuando Moshé tardó en descender del monte Sinai, los hebreos se dirigieron a Aharón, quien en un momento de aparente debilidad accedió a la fundición del oro en un “becerro” que se convirtió en el elemento de devoción para el pueblo. Sincronizado con las necesidades emocionales del pueblo, evitó males mayores al ceder momentáneamente a sus demandas para ganar tiempo y permitir que Moshé retornase.
Mientras que la actividad intelectual y espiritual era primordial, la sensibilidad del Kohén hacia las necesidades emocionales del pueblo, como testimonia el caso citado, sirvió para crear un lazo existencial entre el Kohén y cada miembro de la naciente nación hebrea.
En este sentido, citamos un episodio mencionado por el rabino Jacob J. Shacter de Yeshiva University. En los años 30 del siglo pasado, dos grandes figuras rabínicas coincidieron en un lugar de veraneo: Rabí Chaim Ozer Grodzensky yRabí Meir Yechiel HaLevi Holzstock, el Rebe de Ostrowiec.
Después de las correspondientes formalidades, Rabí Chaim Ozer le pidió al Rebe de Ostrowiec que articulara alguna explicación novedosa de los capítulos de nuestro texto bíblico.
Finalmente, el Rebe accedió porque Rabí Chaim Ozer se refirió a él como Gavra Raba, un gran hombre. El Rebe quería utilizar la oportunidad para señalar que Gavra Rabano era realmente la persona que tenía mayores conocimientos, sino que el calificativo se refería a una cualidad diferente de la persona.
El Talmud enseña que, si bien la Torá afirma que el incumplimiento de ciertas normas acarrea el castigo de 40 azotes, los jajamim, de acuerdo con la Torá shebealpé, modificaron esta cantidad y establecieron que 39 era el número requerido de latigazos. Este texto del Talmud continúa con la afirmación de que las personas que se ponen de pie delante de la Torá y no lo hacen en la presencia de un Gavra Raba, el individuo que es estudioso de la Torá, cometen una simpleza, una necedad. Esta norma se encuentra hacia el final de Devarim, el último libro de la Torá.
Cuestiona el Rebe de Ostrowiec: ¿por qué tuvo que esperar el Talmud hasta los últimos capítulos de la Torá, cuando un caso paralelo aparece en nuestro texto? La Torá ordena en nuestros capítulos que se debe contar 50 días desde el día después del Shabat (segundo día de Pésaj) para festejar Shavuot. Y en este caso, el Talmud también modifica la cifra de 50 para señalar que se deben contar 49 días solamente.
De nuevo observamos el poder intelectual de los jajamim, quienes podían interpretar el texto escrito de laTorá de tal manera que se modificara la celebración de Shavuot, situándola en una fecha diferente. Por lo tanto, seguramente hay que ponerse de pie en presencia de un Gavra Raba, la persona erudita en el contenido de la Torá.
Concluye el Rebe señalando que el Talmud tuvo que esperar hasta el episodio de los 39 azotes en la Parashá Ki Tetsé porque, en ese caso, los jajamim mostraron compasión por el sufrimiento, incluso el del pecador cuando rebajaronun latigazo de su castigo. O sea que Gavra Raba, no es necesariamente un apelativo que se refiere al cúmulo de conocimientos o a quien realiza proezas intelectuales insólitas. Gavra Raba es el individuo que muestra sensibilidad y solidaridad con quien está humillado, quien se apiada de la persona, incluso con aquella que tomó un rumbo equivocado en la vida.
La descendencia de Aharón continúa, sin interrupción, hasta el presente. No obstante, la inexistencia del Beit HaMikdash y la ausencia de los Korbanot, la labor del Kohén sigue vigente porque simboliza la urgencia de limar las asperezas entre posiciones conflictivas, la búsqueda del entendimiento y la paz en el seno del pueblo hebreo. Sobre todo, la solidaridad con los más necesitados y muchas veces abandonados por la sociedad.
Por favor me puede explicar las razones de porque la cuenta de 50 días para celebrar Shabuot se quedo en 49 cuando la Tora expresamente menciona 7 semanas 49 días y al siguiente el 50 día celebra la Fiesta. Gracias shalom