Lecciones del Líder
EL PUEBLO ELEGIDO
KI TAVÓ_DEUTERONOMIO XXVI:1-XXIX:8
Nuestro texto bíblico incluye la afirmación divina de que el pueblo hebreo es am segulá: una “nación que es un tesoro”, que cumple sus instructivos y, por ello, será un pueblo consagrado al Señor. Este texto que destaca la singularidad del pueblo hebreo sirvió para que el judío pudiera tolerar y resistir las adversidades que la historia le presentó. Mientrasque gran parte de la Humanidad veía con sentimientos de´desprecio al judío, la Biblia lo consideraba un pueblo “tesoro”, elegido por Dios.
Sholem Aleijem, hombre letrado del siglo pasado que escribió en el vernáculo yídish y en cuya obra, Toivie der mílijiguer, se basa “El violinista sobre el tejado”, pone en los labios de su héroe Tevye: “¿Por qué no escoges por un tiempo a otro pueblo?”, en una de sus frecuentes conversaciones con Dios. Si la “elección” produjo la persecución, Tevye está dispuesto a renunciar a esta distinción, al menos por un tiempo.
Hay quienes sostienen que esta “elección” produjo un sentimiento de superioridad en el judío, hecho que a su vez produjo el rechazo general, porque ningún pueblo está dispuesto a reconocer la superioridad, intelectual o espiritual, de otra nación. Una revisión superficial de la historia de la Humanidad impide concluir que el pueblo judío hubiera sido privilegiado; al contrario, fue perseguido de manera ejemplar. Sin embargo, no se puede negar que es un pueblo testarudo; en el lenguaje bíblico es am keshé óref, un pueblo con un cuello invencible, no se doblega ante la adversidad. Fue golpeado y herido por diferentes ejércitos y bandoleros, pero ha sobrevivido hasta el presente, mientras que Medinat Israel asegura su futuro.
La narración bíblica en Bereshit acerca de la creación de un solo hombre, Adam, padre de la Humanidad, impide que el judío alegue que desciende de ancestros más ilustres. La “elección” obviamente no puede tener una raíz biológica o genética. Se basa en el hecho de que Avraham, padre del pueblo judío, concibió la existencia de un solo Dios, que es la idea más poderosa y que ha tenido la mayor influencia sobre la Humanidad en todos los campos, incluso el científico, que asume la existencia de normas universales que no se rigen de acuerdo con los caprichos de alguna deidad del mundo de la idolatría. “Dios no juega dados con el universo”, sentenció Albert Einstein. La idea de la existencia de un solo Dios produce el corolario de que tiene que haber alguna razón para todo fenómeno de la naturaleza.
Para ser miembro de este grupo “escogido” hay que nacer de un vientre judío. La condición judía se transmite por medio de los cromosomas. Pero hay una segunda vía: la conversión. La persona que considere que los principios que enuncia el judaísmo responden a sus inquietudes espirituales personales y manifiesta la disposición de regir su vida de acuerdo con los principios e instructivos del judaísmo, puede optar por la conversión y exigir pertenencia a ese pueblo “escogido” por Dios. Está claro que la escogencia no es racial, porque si tal fuera el caso no existiría la conversión.
La pertenencia está abierta a quien desea inscribirse en una hermandad que tiene una misión cardinal: la diseminación de la idea de la existencia de un solo Dios y, sobre todo, lo que este ideal implica para el comportamiento humano. No es sólo un acto de fe de orden intelectual o teológico: tiene una clara y definida implicación para el hombre. La fe en un solo Dios exige un comportamiento solidario con el prójimo, de asistencia al necesitado y al perseguido. Al mismo tiempo, el judaísmo impone un régimen estricto de conducta personal, cuyo propósito también es la autodisciplina: “Porque no sólo para el pan vive el hombre, sino a través de la palabra de Dios vive el hombre”.
Cuando el presidente Kennedy le sugirió al pueblo americano “No digas qué es lo que el país puede hacer por ti, sino qué es lo que tú puedes hacer por el país”, estaba enunciando un principio básico del judaísmo. Porque ser judío involucra una serie de obligaciones y deberes, tareas y no privilegios. Los privilegios y las prerrogativas debilitan al individuo y la nación. Las tareas y los compromisos fortalecen el carácter de la persona y del colectivo.
Los retos y los desafíos templaron el carácter del pueblo judío y permitieron que no se doblegara ante la adversidad, la persecución e incluso el genocidio de la tercera parte de su gente medio siglo atrás. El judío no fue creado a la imagen y semejanza de Dios: Adam, el primer hombre y padre de la Humanidad, fue insuflado con el espíritu del Creador. Esto implica que todo ser humano puede retornar a las raíces de su creación y que nadie puede considerar que por alguna razón es superior al prójimo. La superioridad, si existe tal concepto, sólo puede ser una función de un comportamiento moral y ético que se desprende de las enseñanzas de las Sagradas Escrituras, de la Torá.
Nuestros capítulos condicionan la conquista de la Tierra Prometida por el pueblo judío con un comportamiento acorde con las Mitsvot. El hecho que destaca al judío y lo transforma en un “tesoro” es una vida regida por la Mitsvá, que transforma lo que es mundano y cotidiano en un acto espiritual, transforma incluso el indispensable pan que el hombre ingiere para existir, porque lo que da contenido y sentido a la existencia es una vida acorde con la palabra de Dios, tal como reza el versículo que citamos.
MITSVÁ: ORDENANZA DE LA TORÁ EN ESTA PARASHÁ
CONTIENE 3 MITSVOT POSITIVAS Y 3 PROHIBICIONES
- Deuteronomio 26:5 Recitar una declaración al traer los primeros frutos al Templo
- Deuteronomio 26:13 Recitar una declaración al traer el diezmo al Templo
- Deuteronomio 26:13 No ingerir el Segundo Diezmo en un estado de luto
- Deuteronomio 26:14 No ingerir el Segundo Diezmo mientras en estado de impureza ritual
- Deuteronomio 26:14 No gastar el dinero para alimento y bebida por el cual se ha canjeado el Segundo Diezmo
- Deuteronomio 28:9 Imitar los caminos de Dios cumpliendo Sus Mandamientos
THE CHOSEN PEOPLE
KI TAVO_DEUTERONOMY XXVI:1-XXIX:8
Our biblical text includes the divine affirmation that the Hebrew people are Am segula: a “nation that is a treasure,” that fulfills its instructions and, therefore, will be a people consecrated to the Lord. This text highlights the uniqueness of the Hebrew people and served the Jew to tolerate and resist the adversities of History. While much of humanity viewed the Jew with rejection and disdain, the Bible considered them a “treasure”, a people chosen by God.
Sholem Aleichem, a man of letters of the last century who wrote in the Yiddish vernacular and on whose work, Toivi’e der milchiger, was the source for “Fiddler on the Roof”, puts on the lips of his hero Tevye: “Why don’t you choose another people for a while?”, in one of his frequent conversations with God. If the “election” produced persecution, Tevye is willing to give up this distinction, at least for a while.
There are those who argue that this “choice” also gave a feeling of superiority to the Jew, a fact that in turn produced a generalized rejection, because no people are willing to recognize the superiority, intellectual or spiritual, of another nation. A cursory review of human history precludes the conclusion that otherwise, the Jewish people would have been privileged; on the contrary, he was persecuted in an exemplary manner. However, there is no denying that Jews are stubborn people; in biblical language Am keshe oref, “a stiff-necked people” that does not bow to adversity. He was beaten and wounded by different armies and bandits, yet survived, while Medinat Israel assures its future.
The biblical narrative in Bereshit about the creation of one man, Adam, the father of mankind, prevents the Jew from claiming that he descends from more illustrious ancestors. The “choice” obviously cannot have a biological or genetic root. It is based on the fact that Avraham, father of the Jewish people, conceived the existence of one God, and that is the most powerful idea and has had the greatest influence on Humanity in all fields, including the scientific, that assumes the existence of universal norms that are not governed according to the whims of the different deities of idolatry. “God does not play dice with the universe,” Albert Einstein said. The idea of the existence of one God produces the corollary that there must be some reason for every phenomenon of nature.
To be a member of this “chosen” group you have to be born from a Jewish womb. The Jewish condition is transmitted through chromosomes. But there is a second way: conversion. A person who considers that the principles enunciated by Judaism respond to his personal spiritual concerns and manifests the will to govern his life in accordance with the principles and instructions of Judaism, can opt for conversion and demand insertion into that people “chosen” by God. It is clear that the choice is not racial, because if such were the case there would be no possibility for conversion.
Belonging is open to those who wish to enroll in a brotherhood that has a cardinal mission: the dissemination of the idea of the existence of one God and, above all, what this ideal implies for human behavior. It is not only an act of faith of an intellectual or theological order: it has a clear and definite implication for man. Faith in one God requires a behavior of solidarity with one’s neighbor, of assistance to the needy and the persecuted. At the same time, Judaism imposes a strict regime of personal conduct, the purpose of which is also self-discipline: “For man lives not only for bread but through the word of God man lives.”
When President Kennedy suggested to the American people, “Don’t say what the country can do for you, but what you can do for the country,” he was enunciating a basic principle of Judaism. Because being a Jew involves a series of obligations and duties, tasks and not privileges. Privileges and prerogatives weaken the individual and the nation. Tasks and commitments strengthen the character of the individual and the collective.
Challenges tempered the character of the Jewish people and allowed it not to bow to adversity, persecution, and even to the genocide of a third of its people some 70 years ago. The Jew was not created in the image and likeness of God: Adam, the first man, and father of mankind received the breath of the spirit of the Creator. This implies that every human being can return to the roots of his creation and that no one can consider that for some reason he is superior to his neighbor. Superiority, if there is such a concept, can only be a function of moral and ethical behavior that follows from the teachings of the Holy Scriptures, from the Tora.
Our chapters condition the conquest of the Promised Land by the Jewish people with behavior consistent with the Mitzvot. The fact that transforms a Jew into a “treasure” is a life governed by Mitsva, which changes what is worldly and daily into spiritual action.
MITZVAH: TORA ORDINANCE IN THIS PARSHA
CONTAINS 3 POSITIVE MITZVOT AND 3 PROHIBITIONS
606. Deuteronomy 26:5 Recite a statement as you bring the first fruits to the Temple
607. Deuteronomy 26:13 Recite a statement when bringing tithing to the Temple
608. Deuteronomy 26:13 Do not ingest the Second Tithe in a state of mourning
609. Deuteronomy 26:14 Do not ingest the Second Tithe while in a state of ritual impurity
610. Deuteronomy 26:14 Do not spend the money for food and drink for which the Second Tithe has been exchanged
611. Deuteronomy 28:9 Imitating God’s Ways by Fulfilling His Commandments
¿Qué Representó la Reina?
THE PROPHECY OF YESTERYEAR
SHOFTIM_DEUTRONOMY XVI:18-XXI:9
The future conquest of the Promised Land required the structuring of command to govern the nation that was emerging. Years later, the prophet Shemuel would anoint the first king, Shaul, to begin the new stage of the monarchy. The figure of the king would serve to unify the 12 tribes and turn them into a nation. In this scheme of government, we find the person of the prophet as an integrating element. While in Egypt Pharaoh went to his magicians and sorcerers to confirm his actions or to interpret his dreams, as the book of Shemot attests, the Hebrew prophet represented the “conscience” of the collective, and had the power to admonish the king. and, in this manner, limit his unrestricted power. That is why we find the prohibition against all kinds of sorcery in our chapters.
The Tora mandates the selection of a king; however, the prophet Shemuel initially opposed this idea, claiming that the king would demand taxes and become an additional burden on the people. After all, the figure of the king somehow conflicted with the notion that God was the only king whose command was to be obeyed. On the other hand, the figure of the Navi, the prophet, is an integral part of Judaism’s teaching that every human leader is subject to evaluation and criticism.
This character never came into conflict with the Deity, because the prophet verbalized the moral imperative that the Tora commands. Just as the king had to come from the bosom of the people, a fact that in his time limited the authority of King Herod, who was an Ammonite, the prophet also had to be a son of the Hebrew people. He was an integral part of the fundamental leadership of the government. Although the prophet was the spokesman for God’s word, as manifested by the Gentile prophet Bil’am when King Balak asked him to slander and curse the Hebrew people, there is no doubt that each individual imprints his own style and each prophet leave a mark of his personality through his message.
The influence and respect exercised by the prophet also led to the betrayal of his vocation. The Tora warns that under certain circumstances false prophets may arise who will try to lead the people down the path of disobedience of the Mitzvot. The Tora emphasizes that divine instructions do not have a passing character and can serve as a test of the prophet’s authenticity when he points to a path other than that traced by God.
During the history of the Jewish people, some false prophets emerged who interpreted the Mitzvot as if they were a circumstantial code of ethics, which lacked absolute validity. Perhaps Shabetai Zvi – a character who described himself as Messiah provoked a period of tragedy for the people. By following his instructions, they stripped themselves of their goods in preparation for the revelation of this messenger of God, who would lead them back to the Promised Land. His leadership failed and he can be considered as one of the false prophets.
Why don’t contemporary prophets emerge? According to the Talmud, Chagai and Malachi conclude the period of the prophets. It is possible that this argument points to the fact that the Holy Scriptures, together with the explanations contained in the Talmud, constitute a complete and sufficient revelation that shows the right path, even in the present absence of prophecy.
MITZVAH: TORAH ORDINANCE IN THIS PARSHA
CONTAINS 14 POSITIVE MITSVOTS AND 27 PROHIBITIONS
- Deuteronomy 16:18 Appoint judges and officers in every Jewish community
- Deuteronomy 16:21 Do not plant a tree by the Altar
- Deuteronomy 16:22 Do not erect an idolatrous pillar
- Deuteronomy 17:1 Do not offer an animal with a blemish, even if it is a temporary strike
- Deuteronomy 17:10 Abide by what the Jewish Supreme Court dictates in every generation
- Deuteronomy 17:11 Do not disobey the word of the Jewish Supreme Court
- Deuteronomy 17:15 Naming a Jewish King
- Deuteronomy 17:15 Do not name a Jewish King who is not a native Israelite
- Deuteronomy 17:15 – A king should not accumulate more horses than he needs
- Deuteronomy 17:16 Do not reside in the Land of Egypt
- Deuteronomy 17:17 A king should not have too many wives
- Deuteronomy 17:17 A king should not accumulate excess gold and silver
- Deuteronomy 17:18 A king must write a Tora, in addition to the one that every Jew must write.
- Deuteronomy 18:1 The Levites are not to inherit land in the Land of Israel
- Deuteronomy 18:1 The Levites are not to partake of the spoils during the conquest of the Land of Israel
- Deuteronomy 18:3 To give the Kohen the shoulder, jaw and final stomach of an animal offering
- Deuteronomy 18:4 Separating Teruma from products
- Deuteronomy 18:4 To give the Kohanim the first shearing
- Deuteronomy 18:4 The Kohanim must serve in the Temple according to guards and in times of festivities they are to serve in unison.
- Deuteronomy 18:10 Do not practice divination
- Deuteronomy 18:10 Do not practice witchcraft
- Deuteronomy 18:10-11 Do not use amulets
- Deuteronomy 18:10-11 Do not consult a medium
- Deuteronomy 18:10-11 Do not consult a Yidon (magician)
- Deuteronomy 18:10-11 Do not attempt contact with a dead person
- Deuteronomy 18:15 Listen to every prophet of the generation unless he adds or reduces what is in the Tora
- Deuteronomy 18:20 Do not issue false prophecy
- Deuteronomy 18:20 Do not issue prophecy in the name of an idol
- Deuteronomy 18:22 Do not stop executing a false prophet and do not fear him
- Deuteronomy 19:3, 6, Preparing 6 Cities of Refuge
- Deuteronomy 19:13, 21 Having no mercy on the person who deals a mortal blow during a capital trial
- Deuteronomy 19:14 Do not falsely move your boundaries
- Deuteronomy 19:15 Do not judge based on the word of a single witness
- Deuteronomy 19:19 Asking the false witness what he tried to do to a victim with his testimony
- Deuteronomy 20:3; 7:21 Do not fear the enemy in battle
- Deuteronomy 20:5-7 Anointing a Kohen for war
- Deuteronomy 20:10 Behave in an Optional War according to the rules of the Tora
- Deuteronomy 20:16 Do not allow any of the 7 nations that inhabited the Land of Israel to live
- Deuteronomy 21:1 Do not destroy fruit trees during a siege, nor cause useless destruction
- Deuteronomy 21:1 Breaking the calf’s neck in the riverbed
- Deuteronomy 21:4 Neither ploughing nor sowing in the riverbed where the calf’s neck was broken
LA PROFECÍA DE ANTAÑO
SHOFTIM_DEUTRONOMIO XVI:18-XXI:9
La futura conquista de la Tierra Prometida exigía la estructuración del mando para gobernar la nación que estaba emergiendo. Años más tarde, el profeta Shemuel ungiría al primer rey, Shaúl, para dar inicio a la etapa de la monarquía. La figura del rey sirvió para unificar a las 12 tribus y convertirlas en una nación. En este esquema de gobierno, encontramos la persona del profeta como un elemento integrador. Mientras que en Egipto el Faraón acudía a sus magos y hechiceros para confirmar sus acciones o para interpretar sus sueños, como atestigua el libro de Shemot, el profeta hebreo representaba la “conciencia” del colectivo, tenía la potestad de amonestar al rey y, de esta manera, podía limitar su poder irrestricto. Por ello encontramos la prohibición contra todo tipo de hechicería en nuestros capítulos.
La Torá ordena la selección de un rey; sin embargo, el profeta Shemuel se opuso inicialmente a esta idea, alegando que el rey exigiría impuestos y se convertiría en una carga adicional para el pueblo. A fin de cuentas, la figura del rey entraba en conflicto de alguna manera con la noción de que Dios era el único rey cuyo mandato se debía acatar. Por otro lado, la persona del Naví, el profeta, forma parte íntegra de la enseñanza del judaísmo de que todo mandatario humano debe estar sujeto a la evaluación y a la crítica.
Este personaje nunca entró en conflicto con la Deidad, porque el profeta verbalizaba el imperativo moral que la Torá ordena. Tal como el rey tenía que provenir del seno del pueblo, hecho que en su época limitó la autoridad del rey Herodes, que era amonita, el profeta también tenía que ser un hijo del pueblo hebreo: formaba parte del liderazgo fundamental del gobierno. Aunque el profeta era el portavoz de la palabra de Dios, como lo manifestó el profeta gentil Bil’am cuando el rey Balak le solicitó que calumniara y maldijera al pueblo hebreo, no hay duda de que cada individuo estampa su propio estilo y cada profeta dejó una huella de su personalidad por medio de su mensaje.
La influencia y el respeto que ejercía el profeta condujeron a que se falsificara esta vocación. La Torá advierte que bajo ciertas circunstancias pueden erigirse los falsos profetas que tratarán de conducir al pueblo por el sendero de la desobediencia de las Mitsvot. La Torá enfatiza que los instructivos divinos no tienen un carácter pasajero y pueden servir como una prueba de la autenticidad del profeta cuando éste señala un camino diferente al trazado por Dios.
Durante el transcurso de la historia del pueblo judío surgieron algunos falsos profetas que interpretaron las Mitsvot tal como si se tratara de un código de ética circunstancial, que carecía de validez absoluta. Tal vez Shabetai Zvi –personaje que se autocalificó de Mesías y produjo una enorme tragedia para el pueblo que, siguiendo sus instructivos, se despojó de sus bienes en preparación para la revelación de este mensajero de Dios, que los conduciría nuevamente a la Tierra Prometida– puede ser considerado como uno de los falsos profetas.
¿Por qué no surgen los profetas contemporáneos? Según el Talmud, con Jagai y Malají concluye el período de los profetas. Es posible que este argumento apunte al hecho de que las Sagradas Escrituras, aunadas a las explicaciones contenidas en el Talmud, constituyen una revelación completa y suficiente que permite escoger el camino correcto, incluso en la ausencia actual de la profecía.
MITSVÁ: ORDENANZA DE LA TORÁ EN ESTA PARASHÁ
CONTIENE 14 MITSVOT POSITIVAS Y 27 PROHIBICIONES
- Deuteronomio 16:18 Designar jueces y oficiales en cada comunidad judía
- Deuteronomio 16:21 No plantar un árbol junto al Altar
- Deuteronomio 16:22 No erigir un pilar idólatra
- Deuteronomio 17:1 No ofrendar un animal con tacha, aunque sea tacha temporal
- Deuteronomio 17:10 Acatar lo que dictamine la Corte Suprema Judía en cada generación
- Deuteronomio 17:11 No desobedecer la palabra de la Corte Suprema Judía
- Deuteronomio 17:15 Nombrar un Rey Judío
- Deuteronomio 17:15 No nombrar un Rey Judío a quien no es un nativo Israelita
- Deuteronomio 17:15 Un rey no debe acumular más caballos de los que necesita
- Deuteronomio 17:16 No residir en la Tierra de Egipto
- Deuteronomio 17:17 Un rey no debe tener demasiadas esposas
- Deuteronomio 17:17 Un rey no debe acumular exceso de oro y plata
- Deuteronomio 17:18 Un rey debe escribir una Torá, además de la que cada judío debe escribir
- Deuteronomio 18:1 Los Levitas no deben heredar tierra en la Tierra de Israel
- Deuteronomio 18:1 Los Levitas no deben participar del botín durante la conquista de la Tierra de Israel
- Deuteronomio 18:3 Entregar al Kohén el hombro, la quijada y el estómago final de una ofrenda animal
- Deuteronomio 18:4 Separar Terumá de los productos
- Deuteronomio 18:4 Entregar a los Kohanim la primera esquila
- Deuteronomio 18:4 Los Kohanim deben servir en el Templo de acuerdo con guardias y en épocas de festividades deben servir en unísono
- Deuteronomio 18:10 No practicar adivinaciones
- Deuteronomio 18:10 No practicar brujería
- Deuteronomio 18:10-11 No utilizar amuletos
- Deuteronomio 18:10-11 No consultar un médium
- Deuteronomio 18:10-11 No consultar un yidoní (mago)
- Deuteronomio 18:10-11 No intentar contacto con un muerto
- Deuteronomio 18:15 Escuchar a todo profeta de la generación, a menos que añada o reduzca lo que está en la Torá
- Deuteronomio 18:20 No emitir profecía falsa
- Deuteronomio 18:20 No emitir profecía en nombre de un ídolo
- Deuteronomio 18:22 No dejar de ejecutar a un profeta falso y no temerlo
- Deuteronomio 19:3, 6 Preparar 6 Ciudades de Refugio
- Deuteronomio 19:13, 21 No tener piedad de la persona que asesta un golpe mortal durante un juicio de pena capital
- Deuteronomio 19:14 No mover falsamente tus lindes
- Deuteronomio 19:15 No juzgues basado en la palabra de un solo testigo
- Deuteronomio 19:19 Hacerle al testigo falso lo que intentó hacerle a una víctima con su testimonio
- Deuteronomio 20:3; 7:21 No temer al enemigo en la batalla
- Deuteronomio 20:5-7 Ungir al Kohén para la guerra
- Deuteronomio 20:10 Comportarse en una Guerra Optativa de acuerdo con las reglas de la Torá
- Deuteronomio 20:16 No permitir que vivan ninguna de las 7 naciones que habitaban la Tierra de Israel
- Deuteronomio 21:1 No destruir árboles frutales durante un sitio, ni causar destrucción inútil
- Deuteronomio 21:1 Quebrar el pescuezo del ternero en el cauce del río
- Deuteronomio 21:4 Ni arar ni sembrar en el cauce del río donde el pescuezo del ternero fue quebrado
El Nuevo Judío
ASSISTANCE TO THE NEEDY
RE’E_DEUTRONOMY XI:26-XVI:17
One of the greatest scourges of our day is poverty. The United Nations designated a period of 20 years to alleviate the terrible consequences of social injustice and soon, in the middle of the established period, an international meeting will be held to evaluate the progress of this “war on poverty”. Our chapters refer to the obligation to assist the poor, and the needy.
How is the poor defined? According to the interpretation of the Talmud and the Midrash, poverty is relative, it is a function of previous well-being. When the majority has a roof of their own, those who do not have it can be described as poor. Under the heading of poverty is the person who previously had a horse and, for various reasons, lost this horse, while the individual who never had a horse is not necessarily considered a poor person.
Every third year of the Shemita period, which consisted of 7 years, there was the duty of tithing for the poor. The corners of the fields were also reserved so that the poor could participate in the harvest. What were the characteristics of the poor? Considered poor were those who did not have enough resources to satisfy hunger or to buy indispensable clothes for their family. This definition must be adapted to the circumstances, according to the changes that occur in society.
Those who cannot access health care and education must be classified as “poor” today. Because of human weaknesses, there are those who wish to take advantage of the generosity of others and, in particular, of organizations that provide aid to those in need. It is worth asking whether the applicant’s degree of poverty can be investigated.
According to Rambam, when the person extends his hand because he is hungry, the honesty of the applicant should not be scrutinized: it is imperative to respond immediately to this request. On the other hand, when the apparent homeless person requests clothes, it can be investigated if the request really deserves an affirmative answer. The different response to these calls for help is since the person may starve one cannot wait for an examination of this situation, while clothing, with the exception of the case of intense cold, can be qualified as a necessity, not as a vital emergency.
Even as a child, the future Rebbe of Kotzk asked his teacher if our ancestors performed all the Mitzvot in the desert and, if the answer was yes, how they fulfilled the obligation to assist the needy when manna fell daily from heaven, and no one went hungry. The Rebbe’s incisive question during his childhood points to the fact that helping the poor also serves to sensitize the donor, because the practice of Tsedaka gives the donor a deeper and more human meaning to existence.
To avoid abuse, the Chachamim warned that whoever falsely tried to take advantage of the generosity of others would not end their earthly days without falling into disgrace and without truly requiring the help of others. Jewish communities have traditionally and historically been characterized by their attention to the needs of the poor and the widow, the orphan and the young woman who required the means necessary to marry. In this way, the biblical instruction of the weekly text acquired validity that continues to this day.
MITZVAH: TORA ORDINANCE IN THIS PARSHA
CONTAINS 17 POSITIVE MITSVOT AND 38 PROHIBITIONS
- Deuteronomy 12:2 Destroy idolatrous places of service
- Deuteronomy 12:4 Do not erase sacred writings, write the Name of God, or destroy places of devotion that bear His Name
- Deuteronomy 12:5-6 Bring all the voluntary offerings and offerings promised at the first pilgrimage festival that occurs after the promise is made
- Deuteronomy 12:13 Do not sacrifice outside the Temple
- Deuteronomy 12:13 Sacrifice all offerings in the Temple and not outside of it
- Deuteronomy 12:15 Redeem consecrated animals for offerings that have been acquired
- Deuteronomy 12:17 Do not eat the second tithe of grains outside Jerusalem
- Deuteronomy 12:17 Do not consume the second tithe of wine outside of Jerusalem
- Deuteronomy 12:17 Do not consume the second tithe of oil outside of Jerusalem
- Deuteronomy 12:17 Do not consume an unblemished firstborn animal outside of Jerusalem
- Deuteronomy 12:17 Not eating the flesh of a sin offering or guilt offering outside the Temple
- Deuteronomy 12:17 Do not eat the flesh of a burnt offering
- Deuteronomy 12:17Do not eat the flesh of a lower holiness offering before its blood is sprinkled on the Altar
- Deuteronomy 12:17 The Kohanim are not to eat the first fruits before they are placed in the Temple Courtyard
- Deuteronomy 12:19 Do not fail to give the Leviim their corresponding gifts, especially at the time of the holiday
- Deuteronomy 12:21 Ro ritually sacrifice the animal before eating its flesh
- Deuteronomy 12:23 Do not eat a member of a living animal
- Deuteronomy 12:26 Bring the offering of an animal to be offered in the Temple, even from the diaspora
- Deuteronomy 13:1 Do not add to the Mitsvot of the Tora
- Deuteronomy 13:1 Do not subtract from any of the Mitsvot of the Tora
- Deuteronomy 13:4 Do not listen to anyone who prophesies in the name of an idol
- Deuteronomy 13:9 Not having affection for one who incites idolatrous worship
- Deuteronomy 13:9 Do not diminish our hatred for those who incite idolatrous worship
- Deuteronomy 13:10 Do not rescue from death those who incite idolatrous worship
- Deuteronomy 13:9 – Whoever has been ill-influenced should not speak for those who incite idolatrous worship
- Deuteronomy 13:9 – Who has been ill-influenced must not fail to criticize those who incite idolatrous worship
- Deuteronomy 13:12 Do not incite a Jew to idolatrous worship
- Deuteronomy 13:15 Thoroughly examine witnesses
- Deuteronomy 13:17 Burn the city that has strayed and worships idols, along with all that it contains
- Deuteronomy 13:17 Not to rebuild to its former condition the city that has strayed and worshipped idols
- Deuteronomy 13:17 – Do not derive any benefit from the wealth of the city that has deviated and worshipped idols
- Deuteronomy 14:1 Do not lacerate yourself as those who worship idols do
- Deuteronomy 14:1 Do not uproot hair from the head out of sadness caused by a dead person
- Deuteronomy 14:3 Do not eat the offerings of sacred animals that were disqualified
- Deuteronomy 14:11 Examine the bird’s signs to see if it is kosher
- Deuteronomy 14:19 Do not eat locusts that are not kosher or insects with wings
- Deuteronomy 14:21 Do not eat the flesh of any domestic animal or wild animal that died on its own
- Deuteronomy 14:22 The Second Tithe
- Deuteronomy 14:28 Tithing for the Poor in the third year instead of the Second Tithe
- Deuteronomy 15:2 Failure to demand payment for a debt over which the Sabbatical Passed
- Deuteronomy 15:3 Collecting the full payment of a loan from a non-Jew
- Deuteronomy 15:3 Forgiving debts in the Sabbath Year
- Deuteronomy 15:7 Not to stop supporting a poor person and giving him what he needs
- Deuteronomy 15:8 Giving charity
- Deuteronomy 15:9 – Do not stop lending to the poor because the Sabbath Year will cancel the debt
- Deuteronomy 15:13 Do not allow the Hebrew slave to go free empty-handed
- Deuteronomy 15:13 Give a gift of indemnity to the Hebrew slave when he goes free
- Deuteronomy 15:19 The animal that has been consecrated as an offering should not work
- Deuteronomy 15:19 Do not shave the animal that has been consecrated as an offering
- Deuteronomy 16:3 Do not eat Chamets after noon on the day before Passover
- Deuteronomy 16:4 Do not leave flesh from the offering of the holiday, sacrificed on the 14th of Nisan until the third day
- Deuteronomy 16:5 Do not offer the Passover sacrifice on a private altar
- Deuteronomy 16:14: Rejoice on the Pilgrimage Festivals
- Deuteronomy 16:16 Appear at the Beit HaMikdash, the Temple, at the Pilgrimage Festivals
- Deuteronomy 16:16 Do not go up to Jerusalem and show up at the Beit HaMikdash for a Pilgrimage Festival without an animal offering
LA ASISTENCIA AL NECESITADO
REÉ_DEUTRONOMIO XI:26-XVI:17
Uno de los mayores azotes de nuestros días es la pobreza. La Organización de Naciones Unidas designó un período de 20 años para aliviar las terribles consecuencias de la injusticia social y próximamente, a mitad del período establecido, se realizará una reunión internacional para evaluar el progreso de esta “guerra contra la pobreza”. Nuestros capítulos hacen referencia a la obligación de asistir al pobre, al necesitado.
¿Cómo se define al pobre? De acuerdo con la interpretación del Talmud y del Midrash, la pobreza es relativa, es una función de un bienestar anterior. Está claro que cuando la mayoría tiene un techo propio, se puede calificar de pobre´a quien no lo posee. Pero también entra bajo el rubro de la pobreza la persona que anteriormente tenía un caballo y, por diversas razones, perdió este caballo, mientras que el individuo que nunca tuvo un caballo no es considerado necesariamente como un pobre.
Cada tercer año del período de Shemitá, que consistía en 7 años, existía el deber del diezmo para el pobre. Las esquinas de los campos también estaban reservadas para que los pobres pudieran participar en la cosecha. ¿Cuáles eran las características del pobre? Quien no tenía suficientes recursos para satisfacer el hambre o para la compra de la ropa indispensable para su familia. Esta definición tiene que será adaptada a las circunstancias, de acuerdo con los cambios que se producen en la sociedad.
Está claro que quien no puede acceder a la atención médica y a la educación, debe ser catalogado de “pobre” en la actualidad. Debido a las debilidades humanas, hay quienes desean aprovecharse de la generosidad de otros y, en especial, de las organizaciones que dispensan ayuda a los necesitados. Cabe plantear si acaso se puede investigar el grado de pobreza del solicitante.
Según Rambam, cuando la persona extiende la mano porque tiene hambre, no se debe indagar la honestidad del solicitante: es imperativo responder de inmediato a esta solicitud. En cambio, cuando el aparente indigente solicita ropa se puede averiguar si la solicitud realmente merece una respuesta afirmativa. Se sustenta la respuesta diferente para estos llamados de ayuda en el hecho de que la persona puede morir de hambre, mientras que la ropa, con la excepción del caso del frío intenso, puede calificarse como una comodidad, no como una emergencia vital.
Aun siendo niño, el futuro Rebe de Kotzk le preguntó a su maestro si nuestros antepasados efectuaban todas las Mitsvot en el desierto y, si la respuesta era afirmativa, cómo cumplían con la obligación de asistir al necesitado cuando caía a diario el maná del cielo y nadie pasaba hambre. La incisiva pregunta del Rebe durante su niñez apunta al hecho de que la ayuda al pobre también sirve para sensibilizar al donante, porque la práctica de la Tsedaká le proporciona un sentido más profundo y humano a la existencia.
Para evitar el abuso, los Jajamim advirtieron que quien falsamente intentara aprovecharse de la generosidad del prójimo, no terminaría sus días terrenales sin caer en desgracia y sin requerir verdaderamente la ayuda ajena. Las comunidades judías se han caracterizado tradicional e históricamente por su atención a las necesidades del pobre y de la viuda, del huérfano y de la joven que requería los enseres indispensables para contraer matrimonio. De esta manera, la instrucción bíblica del texto semanal adquirió una vigencia que continúa hasta nuestros días.
MITSVÁ: ORDENANZA DE LA TORÁ EN ESTA PARASHÁ
CONTIENE 17 MITSVOT POSITIVAS Y 38 PROHIBICIONES
- Deuteronomio 12:2 Destruir los lugares de servicio idólatra
- Deuteronomio 12:4 No borrar escritos sagrados, le escrito Nombre de Dios, o destruir lugares de devoción que llevan Su Nombre
- Deuteronomio 12: 5-6 Traer todas las ofrendas y ofrendas voluntarias prometidas en el primer festival de peregrinaje que acontece después de hecha la promesa
- Deuteronomio 12:13 No sacrificar fuera del Templo
- Deuteronomio 12:13 Sacrificar todas las ofrendas en el Templo y no en ninguna parte fuera de él
- Deuteronomio 12:15 Redimir animales consagrados para ofrendas que han adquirido tachas
- Deuteronomio 12:17 No comer el segundo diezmo de granos fuera de Jerusalem
- Deuteronomio 12:17 No consumir el segundo diezmo de vino fuera de Jerusalem
- Deuteronomio 12:17 No consumir el segundo diezmo de aceite fuera de Jerusalem
- Deuteronomio 12:17 No consumir un primogénito animal sin tacha fuera de Jerusalem
- Deuteronomio 12:17 No comer la carne de una ofrenda por pecado u ofrenda por culpa fuera del Templo
- Deuteronomio 12:17 No comer la carne de una ofrenda quemada
- Deuteronomio 12:17No comer la carne de una ofrenda de menor santidad antes que su sangre sea salpicada sobre el Altar
- Deuteronomio 12:17 Los Kohanim no deben comer los primeros frutos antes que sean colocados en la Patio del Templo
- Deuteronomio 12:19 No dejar de dar a los Leviyim sus correspondientes obsequios, especialmente en el momento de la festividad
- Deuteronomio 12:21 Sacrificar ritualmente al animal antes de comer su carne
- Deuteronomio 12:23 No comer un miembro de un animal vivo
- Deuteronomio 12:26 Traer la ofrenda de un animal que se debe ofrendar en el Templo, incluso desde la diáspora
- Deuteronomio 13:1 No añadir a las Mitsvot de la Torá
- Deuteronomio 13:1 No sustraer de ninguna de las Mitsvot de la Torá
- Deuteronomio 13:4 No escuchar a quien profetice en nombre de un ídolo
- Deuteronomio 13:9 No tener afecto por quien incita al culto idólatra
- Deuteronomio 13:9 No disminuir nuestro odio por quien incita al culto idólatra
- Deuteronomio 13:10 No rescatar de la muerte a quien incita al culto idólatra
- Deuteronomio 13:9 Quien ha sido mal influenciado no debe hablar a favor de quien incita al culto idólatra
- Deuteronomio 13:9 Quien ha sido mal influenciado no debe dejar de criticar a quien incita al culto idólatra
- Deuteronomio 13:12 No incitar a un judío al culto idólatra
- Deuteronomio 13:15 Examinar exhaustivamente a los testigos
- Deuteronomio 13:17 Quemar la ciudad que se ha desviado y adora ídolos, junto con todo lo que contiene
- Deuteronomio 13:17 No reconstruir a su condición anterior la ciudad que se ha desviado y adoró ídolos
- Deuteronomio 13:17 No derivar beneficio alguno de la riqueza de la ciudad que se ha desviado y adoró ídolos
- Deuteronomio 14:1 No darse tajos como hacen quienes adoran ídolos
- Deuteronomio 14:1 No desarraigar el pelo de la cabeza por tristeza causada por un muerto
- Deuteronomio 14:3 No comer las ofrendas de animales sagrados que fueron descalificados
- Deuteronomio 14:11 Examinar las señales del ave para ver si es Kasher
- Deuteronomio 14:19 No comer langostas que no son kasher o insectos con alas
- Deuteronomio 14:21 No comer la carne de cualquier animal doméstico o animal salvaje que murió por sí solo
- Deuteronomio 14:22 El Segundo Diezmo
- Deuteronomio 14:28 El Diezmo para el Pobre en el tercer año en lugar del Segundo Diezmo
- Deuteronomio 15:2 No exigir pago por una deuda sobre la cual pasó el Año Sabático
- Deuteronomio 15:3 Cobrar el pago total de un préstamo a un no-judío
- Deuteronomio 15:3 Perdonar deudas en el Año Sabático
- Deuteronomio 15:7 No dejar de apoyar a un pobre y darle lo que necesita
- Deuteronomio 15:8 Dar caridad
- Deuteronomio 15:9 No dejar de prestar al pobre porque el Año Sabático cancelará la deuda
- Deuteronomio 15:13 No permitir que el esclavo hebreo salga libre con manos vacías
- Deuteronomio 15:13 Darle en regalo de indemnización al esclavo hebreo cuando sale libre
- Deuteronomio 15:19 No hacer trabajar al animal que ha sido consagrado como ofrenda
- Deuteronomio 15:19 No rapar el animal que ha sido consagrado como ofrenda
- Deuteronomio 16:3 No comer Jaméts después del mediodía en el día anterior a Pésaj
- Deuteronomio 16:4 No dejar carne de la ofrenda de la festividad, sacrificada el 14 de Nisán hasta el tercer día
- Deuteronomio 16:5 No ofrendar el sacrificio de Pésaj en un altar privado
- Deuteronomio 16:14 Regocijarse en las Festividades de Peregrinaje
- Deuteronomio 16:16 Presentarse en el Beit HaMikdash, el Templo, en las Festividades de Peregrinaje
- Deuteronomio 16:16 No subir a Jerusalem y presentarse en el Beit HaMikdash para una Festividad de Peregrinaje sin una ofrenda animal