LA PROHIBICIÓN DEL SUICIDIO

NASÓ_NÚMEROS VI:21-VII:89

Según el Midrash, el mandamiento que prohíbe el asesinato de otro ser humano incluye la instrucción de no causar la muerte propia: el suicidio. Más aún, se incluye bajo este rubro la proscripción de tomar riesgos innecesarios cuyo resultado pueda ser la muerte. Israel Gilat hace la excelente observación de que, por cometer un asesinato, la persona incumple doblemente. Por un lado, viola el “no matarás” y, por otro lado, debido a su desobediencia recibirá la pena de muerte; o sea, por la grave falta que ha cometido causó la muerte de la víctima y su propia muerte: el castigo que recibirá por el crimen.

Partimos de la premisa de que el cuerpo no le pertenece al individuo, o sea, la persona no puede ejercer su libre albedrío con referencia a su supervivencia. Está limitada. Tiene la obligación de acudir a un médico cuando está enferma y no debe lacerarse, herirse como una demostración de independencia y libertad total. Sin embargo, la historia da testimonio de varias personalidades que optaron por el suicidio cuando tuvieron que enfrentar situaciones apremiantes. El rey Saúl se arrojó sobre una espada clavada en el suelo, a fin de no caer con vida en las manos del enemigo. 

El tema del suicidio es pertinente porque está relacionado con el juez Shimshón (Sansón), el Nazir (persona que promete abstenerse del vino y de cualquier derivado de la uva, no cortarse el pelo y no tener contacto con un cadáver) más famoso del Tanaj, y el estado de Nezirut es uno de los temas centrales de estos capítulos. En la etapa final de su vida, habiendo perdido la vista durante una celebración de los filisteos, Sansón solicitó que lo colocaran entre las dos columnas que sostenían el templo pagano. Con un esfuerzo supremo, desplazó las columnas y así causó la muerte de los filisteos que se encontraban en los alrededores y, lamentablemente, su propia muerte.

Se ofrecen varias explicaciones. Tal vez el suicidio es permitido cuando la muerte es inevitable. Se puede argumentar que los episodios aludidos hacen referencia a situaciones excepcionales de un momento histórico y, por lo tanto, no deben servir como pauta para el futuro. En ambas situaciones, las consecuencias podían incluir la muerte de muchos porque, especialmente en el primer caso, los hebreos habrían intentado rescatar al rey Saúl después de que éste cayera en manos de sus enemigos. En cuanto a Sansón, éste logró eliminar un gran número de enemigos del pueblo judío que, de otra manera, podrían luego haber causado muchas muertes.

Un vergonzoso y trágico evento para la Humanidad de la época del Holocausto testimonia el suicidio, en masa, de un grupo de jóvenes judías que optaron por la muerte en lugar de someterse a la violación de sus cuerpos y a su posterior asesinato a manos de los nazis. La decisión de estas jóvenes fue una demostración de valentía sustentada por su inquebrantable fe.

Es pertinente mencionar el caso de los habitantes de Masada, que optaron por el suicidio cuando fueron sitiados por el enemigo que empezó a escalar hacia la cumbre, anunciando el ineludible fin de la defensa de la fortaleza y la muerte de sus habitantes. En este sentido se puede citar el célebre dictamen del Gran Rabino de Israel Shlomo Goren, quien consideró este suicidio no sólo permisible sino tal vez obligatorio, debido a la probabilidad de que, al ser apresados por el enemigo, los moradores de Masada fueran luego forzados a violar las ordenanzas (cometer incesto, negar públicamente la existencia de Dios, asesinar), y para evitar esta transgresión, la persona debe optar por la muerte. Muchos eruditos retaron la opinión de Goren; sin embargo, su sentir apunta hacia la posibilidad de considerar el suicidio como una opción válida bajo ciertas circunstancias.

MITSVÁ: ORDENANZA DE LA TORÁ EN ESTA PARSHÁ

CONTIENE 7 MITSVOT POSITIVAS Y 11 PROHIBICIONES

1. Números 5:2 Enviar al individuo ritualmente impuro fuera del campo de la Presencia Divina.

2. Números 5:3 El individuo ritualmente impuro no debe entrar al Templo.

3. Números 5:6 Confesar el pecado.

4. Números 5:15 Cumplir las leyes de Sotá (esposa sospechada de cometer infidelidad).

5. Números 5:15 No incluir aceite en la ofrenda de la Sotá.

6. Números 5:15 No incluir especies en la ofrenda de la Sotá.

7. Números 6:3 El Nazir no debe beber vino u otra bebida fuerte derivada de uvas.

8. Números 6:3 El Nazir no debe consumir uvas frescas.

9. Números 6:3 El Nazir no debe consumir pasas.

10.Números 6:4 El Nazir no debe consumir la semilla de la uva.

11.Números 6:4 El Nazir no debe consumir la corteza de la uva.

12.Números 6:5 El Nazir no debe afeitar su cabello.

13.Números 6:5 Permitir que el cabello del Nazir crezca largo.

14.Números 6:6 El Nazir no debe entrar en el recinto donde yace un cadáver.

15.Números 6:7 El Nazir no debe adquirir impureza ritual a través de un cadáver o de cualquier otra fuente de impureza ritual.

16.Números 6:13 Afeitar el pelo del Nazir y traer su ofrenda (en la terminación del período de su promesa de Nazir, o si adquiere impureza ritual).

17.Números 6:23 Recitar la bendición de los Kohanim.

18.Números 7:9 La tribu de Leví debe cargar el Arón HaKódesh, Arca Sagrado sobre los hombros.

THE PROHIBITION OF SUICIDE

NASO_NUMBERS VI:21-VII:89

According to the Midrash, the commandment forbidding the killing of another human being includes the instruction not to cause one’s death: suicide. Moreover, this category includes prohibiting unnecessary risks that may result in death. Israel Gilat makes the excellent observation that, by committing murder, the person is breaching doubly. On the one hand, he violates the “thou shalt not kill”; on the other hand, because of his disobedience, he will receive the death penalty. That is, because of his serious fault, he caused the victim’s death, and his death: the punishment he will receive for the crime is double.

We start from the premise that the body does not belong to the individual; that is, the person cannot exercise his free will concerning survival. It is limited. He or she must go to a doctor when he or she is sick and should not lacerate himself or herself as a demonstration of independence and total freedom. However, the story testifies to several personalities who chose suicide when facing pressing situations. King Saul threw himself on a sword stuck in the ground so as not to fall alive into the hands of the enemy.

The subject of suicide is pertinent because it is related to the Judge Shimshon (Samson), the Nazir (person who promises to abstain from wine and any grape derivatives, not to cut his hair, and not to have contact with a corpse) is most famous of the Tanach, and the state of Nezirut is one of the central themes of these chapters. In the final stage of his life, having lost sight during a celebration of the Philistines, Shimshon requested to be placed between the two columns supporting the pagan temple. With supreme effort, he moved the columns and thus caused the death of the Philistines in the vicinity and, unfortunately, his death.

Several explanations are offered. Perhaps suicide is permitted when death is inevitable. It can be argued that the episodes referred to refer to exceptional situations of a historical moment and, therefore, should not serve as a guideline for the future. In both situations, the consequences could include the death of many because, especially in the first case, the Hebrews would have tried to rescue King Saul after he fell into the hands of his enemies. As for Shimshon, he managed to eliminate many enemies of the Jewish people who might otherwise have caused many deaths.

A shameful and tragic event for humanity from the time of the Holocaust testifies to the suicide, en masse, of a group of young Jewish women who chose death instead of submitting to the rape of their bodies and subsequent murder at the hands of the Nazis. The decision of these young women was a demonstration of courage sustained by their unwavering faith.

It is pertinent to mention the case of the inhabitants of Masada, who chose suicide when they were besieged by the enemy who began to climb towards the summit, announcing the inescapable end of the fortress’s defense and the death of its inhabitants. In this regard, one can cite the famous opinion of the Chief Rabbi of Israel, Shlomo Goren, who considered this suicide not only permissible but perhaps obligatory due to the probability that when captured by the enemy, the inhabitants of Masada would then be forced to violate the ordinances (commit incest, publicly denying the existence of God, murder), and to avoid this transgression, a person must choose death. Many scholars challenged Goren’s view; however, his sentiment points toward considering suicide as a valid option under certain circumstances.

MITZVA: ORDINANCE OF THE TORAH IN THIS PARSHA

CONTAINS 7 POSITIVE MITZVOT AND 11 PROHIBITIONS

1. Numbers 5:2 Sending the ritually unclean individual out of the field of the Divine Presence.

2. Numbers 5:3 The ritually unclean individual must not enter the Temple.

3. Numbers 5:6 Confessing sin.

4. Numbers 5:15 Comply with the laws of Sota (wife suspected of committing infidelity).

5. Numbers 5:15 Do not include oil in the offering of the Sota.

6. Numbers 5:15 Do not include species in the offering of the Sota.

7. Numbers 6:3 The Nazir should not drink wine or other strong beverages derived from grapes.

8. Numbers 6:3 The Nazir should not consume fresh grapes.

9. Numbers 6:3 The Nazir should not consume raisins.

10. Numbers 6:4 The Nazir should not consume the grape’s seed.

11. Numbers 6:4 The Nazir should not consume the rind of the grape.

12. Numbers 6:5 The Nazir must not shave his hair.

13. Numbers 6:5 Allow the hair of the Nazir to grow long.

14. Numbers 6:6 The Nazir must not enter the enclosure where a corpse lies.

15. Numbers 6:7 The Nazir must not acquire ritual impurity through a corpse or any other source of ritual impurity.

16. Numbers 6:13 Shave the hair of the Nazir and bring his offering (at the end of the period of his promise of Nazir, or if he acquires ritual impurity).

17. Numbers 6:23 Reciting the blessing of the Kohanim.

18. Numbers 7:9 The tribe of Levi must carry the Aron HaKodesh, Holy Ark on their shoulders.

EL AUTÉNTICO DEFENSOR DEL PUEBLO

BEHAALOTEJÁ_NÚMEROS VIII:1-XII:16

Es muy difícil penetrar en el espíritu de Moshé (Moisés) y entender su reacción frente a las constantes dificultades que tuvo que enfrentar durante el desempeño de su liderazgo. Aunque el pueblo había salido prácticamente ileso de la persecución egipcia, no hay duda de que el desierto que luego transitarían durante 40 años presentaba un ambiente inhóspito y hostil, fértil para la queja y la depresión, propicio para la insurrección. Para Moshé era una aventura inédita, más aún cuando desde un principio –tal como se expresará en el episodio del Sné, la zarza ardiente– había declinado la invitación de conducir al pueblo.

Moshé escuchó el consejo de su suegro Yitró y designó 70 sabios para que lo acompañarán en la tarea de la enseñanza, a fin de dirimir las diferencias entre litigantes y poder emitir un juicio cuando fuese necesario. Aunque ejerció el liderazgo juntamente con este cuerpo, que eventualmente condujo al establecimiento del Sanhedrín, el pueblo sabía que el liderazgo auténtico reposaba sobre la persona de Moshé. Por ello la desesperación personal de Moshé en el caso del desaliento del pueblo por el consumo del man, el maná que llovía a diario del cielo, y su insaciable apetito por el consumo de carne, que claramente escasea en el desierto.

Debido al descontento del pueblo y su falta de aprecio por todo lo que se había hecho, Dios se enojó con nuestros antepasados y Moshé reaccionó de igual manera. Pero en el caso de Moshé, el disgusto era probablemente doble: aunque estaba enfurecido con el pueblo, tal vez lo estaba más consigo mismo. Por eso Moshé deseó la muerte, pero preferiblemente a manos de Dios y no por un pueblo ingrato.

Aunque Moshé intervino a favor del pueblo, para que Dios no los canjeará por otro, al mismo tiempo no pudo esconder su desengaño por la falta de caballerosidad de las masas. En última instancia, la causa de la protesta no era el sabor insípido del Man que, de acuerdo con el Midrash, sabía según el gusto de cada individuo. La protesta era una manifestación del descontento por la vida rutinaria del desierto, por la ausencia de cambios y el consecuente aburrimiento.

En realidad, era una rebelión contra la Providencia Divina, porque después de recibir un conjunto de leyes en el Sinaí que habían impuesto un freno a sus apetitos carnales y exigía un comportamiento ético general, la uniformidad del panorama desértico no producía ninguna satisfacción espiritual.

Incluso sintieron nostalgia por la esclavitud a las orillas del río Nilo, con su naturaleza cambiante, crisol del entorno cultural más importante de la época. Pero un líder auténtico no se deja llevar por el desengaño y la ingratitud de la gente, reflexiona y siente empatía por las debilidades humanas y, sobre todo, destaca las virtudes que afloran entre la gente como fruto del desafío del rigor del desierto. 

No obstante, los contratiempos y las reservas personales, Moshé se convierte en el gran defensor del pueblo hebreo y discute con Dios para que no elija otro pueblo, incluso asume la culpabilidad por los yerros de los otros. El líder tiene un rol ambivalente: debe mantener distancia de aquellos a quienes dirige y, por otro lado, tiene que identificarse totalmente con su destino, sentir en carne propia el dolor y las angustias que envuelven a su pueblo. 

Moshé se preparó durante ochenta años para asumir el liderazgo que finalizó después de 40 años en las fronteras de la Tierra Prometida. No pisó la Tierra Prometida, pero la visualizó. Subió al monte Nevó, obtuvo una vista panorámica de la naturaleza de Israel, pero tal vez algo más contundente: un repaso de los sucesos de los últimos 40 años y una perspectiva acerca de cuál sería el mañana de ese pueblo rebelde pero heroico, complejo pero dispuesto a diseminar por los confines de la tierra la idea de la existencia del Creador único, el Dios de la Humanidad.

MITSVÁ: ORDENANZA DE LA TORÁ EN ESTA PARSHÁ

CONTIENE 3 MITSVOT POSITIVAS Y 2 PROHIBICIONES

  1. Números 9:11 Ofrendar el Pésaj Shení el 14 de Iyar.
  2. Números 9:11 Comer la ofrenda Pésaj Shení el 14 de Iyar.
  3. Números 9:12 No dejar nada de la ofrenda Pésaj Shení para el día siguiente.
  4. Números 9:12 No romper ningún hueso de ofrenda Pésaj Shení.
  5. Números 10:9-10 Durante batallas y cada ofrenda, sonar las Trompetas en el Templo.

THE REAL OMBUDSMAN

BEHA’ALOTECHA_NUMBERS VIII:1-XII:16

It is very difficult to penetrate the spirit of Moshe (Moses) and understand his reaction to the constant difficulties he faced while leading the Jewish nation. Although the people had emerged practically unscathed from the Egyptian persecution, there is no doubt that their travels in the desert, which would last 40 years in that inhospitable and hostile environment, became fertile for complaint and depression, conducive to insurrection. For Moshe, it was an unprecedented adventure, even more so when from the beginning – as will be expressed in the episode of Sneh, the burning bush – he had initially declined the invitation to lead the people.

Moshe listened to the counsel of his father-in-law Yitro and appointed 70 sages to accompany him in teaching, settling differences between litigants, and passing judgment when necessary. Although he exercised leadership in conjunction with this body, eventually leading to the establishment of the Sanhedrin, the people knew that authentic leadership rested upon Moshe’s shoulders. Hence, Moshe’s desperation in the case of the people’s discouragement while eating Man, the manna that rained daily from heaven, and their insatiable appetite for meat consumption, which is clearly in short supply in the wilderness.

Because of the discontent of the people and their lack of appreciation for all that had been done, God expressed anger with our ancestors, and Moshe reacted in the same way. But in Moshe’s case, the disgust was probably twofold: although he was enraged at the people, perhaps he was also angry with himself. That is why Moshe desired death, but preferably at the hands of God and not at the hands of an ungrateful people.

Although Moshe intervened on behalf of the people so that God would not exchange them for another, at the same time, he could not hide his disappointment at the lack of chivalry of the masses. Ultimately, the cause of the protest was not the tasteless taste of the Man, which, according to the Midrash, reflected the taste of everyone. The protest manifested discontent with a life of routine while in the desert, the absence of change, and the consequent boredom.

It was a rebellion against Divine Providence because after receiving a set of laws at Sinai that had put a brake on their carnal appetites and demanded general ethical behavior, the uniformity of the desert landscape produced no spiritual satisfaction.

They had a nostalgic sentiment for slavery on the banks of the Nile River, with its changing nature, a melting pot during the most important cultural environment of the time. But an authentic leader does not let himself be carried away by disappointment and ingratitude; he reflects and feels empathy for human weaknesses and, above all, highlights the virtues that emerge from the people because of the challenge and rigor of the desert.

Notwithstanding setbacks and personal reservations, Moshe becomes the great defender of the Hebrew people and argues with God so that He does not choose other people, even assuming responsibility for the mistakes of others. The leader has an ambivalent role: he must keep his distance from those he leads and, on the other hand, must identify totally with their destiny. The leader must feel in his flesh the pain and anguish surrounding his people. 

Moshe prepared for eighty years to assume the leadership that ended after 40 years on the borders of the Promised Land. He didn’t set foot in the Promised Land, but he visualized it. He climbed Mount Nevo, and got a panoramic view of the nature of Israel, but perhaps something more forceful: he reviewed the events of the last 40 years and formulated a perspective on what the tomorrow would be for that rebellious but heroic person, complex but willing to spread to the ends of the earth the idea of the existence of the one Creator, the God of Humanity.

MITSVA: TORAH ORDINANCE IN THIS PARSHA

CONTAINS 3 POSITIVE MITZVOT AND 2 PROHIBITIONS

1. Numbers 9:11 Offering Pesach Sheni on the 14th of Iyar.

2. Numbers 9:11 Eating the Pesach Sheni offering on the 14th of Iyar.

3. Numbers 9:12 Leave nothing of the Pesach Sheni offering for the next day.

4. Numbers 9:12 Do not break any bones of the offering Pesach Sheni.

5. Numbers 10:9-10 During battles and each offering, the Trumpets sound in the Temple.

EN POS DE LA MADUREZ NACIONA

SHELAJ_NÚMEROS XIII:1-XV:41

Mientras los primeros capítulos de Bemidbar mencionan el conteo de los que salieron de Egipto y describen la organización del campamento de los hebreos durante la larga travesía por el desierto, el texto semanal describe el grave error cometido por los emisarios que fueron a investigar las características de la Tierra Prometida. Un explorador por tribu era la orden de Moshé, de tal manera que fueron 12 en total. Se dieron dos informes: la mayoría de 10 opinó que no era posible la conquista mientras que una minoría de dos, Calev y Yehoshúa, quien asumiría el liderazgo después de la muerte de Moshé, sin contradecir la descripción ofrecida por la mayoría, intentó animar al pueblo para emprender de inmediato la tarea de la conquista. 

El informe había sido exhaustivo, se hizo una apreciación de las condiciones de las ciudades, la evaluación del carácter de sus habitantes y una estimación de si acaso la naturaleza era suficientemente generosa para alimentar al pueblo hebreo. Pero las verdaderas interrogantes eran otras. ¿Acaso los esclavos del Faraón habían fracturado también las cadenas de la esclavitud espiritual y emocional o solamente las ataduras físicas? ¿Habían interiorizado el valor de la libertad y adquirido suficiente autoestima para iniciar una nueva etapa: una vida nacional independiente en una tierra propia?

El informe mayoritario apuntó a la inmadurez nacional, una falta de voluntad y decisión para emprender una nueva etapa, que transformaría la mentalidad de obediencia a un capataz en una actitud de soberanía y autodeterminación. 

El Netsiv, Rabí Naftalí Zvi Yehudá Berlin, padre de Rabí Meir BarIlan, gran líder del movimiento sionista Mizrahi, cuyo nombre ostenta la Universidad Bar Ilan de Israel, cita la correspondencia establecida por el Midrash entre las cinco menciones de la palabra “luz” en Bereshit con los 5 Libros de la Torá. Según este ordenamiento, la mención de “luz” para nuestro libro corresponde al acto de la separación entre la luz y la oscuridad. Mientras que los primeros Libros de la Torá se refieren a la luz, empezando con Bemidbar se inicia el período de la “oscuridad”; o sea que, los que eventualmente conquistarán la Tierra Prometida pertenecen al grupo de la “oscuridad”. El Netsiv argumenta que el período de “luz” se refiere a la luz Divina que guió a los hebreos durante la primera etapa de su historia. Dios se hizo presente en la vida de los patriarcas, “los acompañó” simbólicamente durante el sufrimiento en Egipto, los protegió en el desierto. Lanzó 10 plagas contra los egipcios para permitir que los hebreos escaparan del yugo de la esclavitud. Les reveló los Diez Mandamientos, que posibilitarían la convivencia y conducirían a la solidaridad humana. 

Fue un largo período de “luz”, cuya fuente era el Creador. Nuestros capítulos inician un período diferente. La “luz” proveniente de Dios ya no sería aparente, tal como lo fue en la etapa anterior. Tendrían que aprender que hay otra “luz”, la energía que proviene del esfuerzo propio. Habían recibido el instructivo representado por la Mitsvá, el legado de un comportamiento apegado a la Palabra de Dios contenida en la Torá. Con esta Torá en la mano, ¿serían acaso capaces de generar una “luz” interna y propia en adelante? 

El informe de los exploradores y la siguiente rebelión liderada por Kóraj, son episodios que reflejan la ansiedad, la intranquilidad de tener que tomar decisiones propias, sin una “nube” celestial que indique cada paso a seguir. El sendero que seguirá el pueblo hebreo será incierto, pero aleccionador. Cada reto será aleccionador y cada desafío permitirá dar un paso adelante hacia la madurez nacional, dignamente representada en nuestros días por Medinat Israel.

MITSVÁ: ORDENANZA DE LA TORÁ EN ESTA PARASHÁ

CONTIENE 2 MITSVOT POSITIVAS Y 1 PROHIBICIÓN

  1. Números 15:20 Separar Jalá de toda masa y entregarla al Kohén.
  2. Números 15:38 Colocar Tsitsit (flecos) en una vestimenta que se viste.
  3. Números 15:39 No desviarse hacia los pensamientos del corazón o lo que los ojos ven.

IN PURSUIT OF NATIONAL MATURITY

SHELACH_NUMBERS XIII:1-XV:41

While the opening chapters of Bemidbar mention the count of those who left Egypt and describes the organization of the camp of the Hebrews during the long journey through the desert, the weekly text describes the grave error made by the emissaries who went to investigate the characteristics of the Promised Land. One scout per tribe was the order of Moshe, so there were 12 in all (The tribe of Levi did not participate). Two reports were given: the majority of 10 believed conquest was not possible, while a minority of two, Calev and Yehoshua, who would assume leadership after the death of Moshe, without contradicting the description offered by the majority, tried to encourage the people to undertake the task of conquest immediately. 

The report had been exhaustive, an assessment of the conditions of the cities, an assessment of the character of their inhabitants, and an estimate of whether nature was generous enough to feed the Hebrew people. But the real questions were different. Had Pharaoh’s slaves also broken the chains of spiritual and emotional slavery or only physical bondage? Had they internalized the value of freedom and acquired enough self-esteem to begin a new stage: an independent national life in their own land?

The majority report pointed to national immaturity, a lack of will, and a decision to undertake a new stage, transforming the mentality of obedience to a foreman into an attitude of sovereignty and self-determination.

The Netsiv, Rabbi Naftali Zvi Yehuda Berlin, fatherofRabbi Meir Bar Ilan, the great leader of the Zionist Mizrahi movement, whose name bears the Bar Ilan University Israel, cites the correspondence established by the Midrash between the five mentions of the word “light” in Bereshit with the 5 Books of the Torah. According to this order, the mention of “light” in our book corresponds to the act of separation between light and darkness. While the early books of the Torah refer to light, beginning with Bemidbar begins the period of “darkness”; those who will eventually conquer the Promised Land belong to the group of “darkness.” The Netsiv argues that the ” light ” period refers to the Divine light that guided the Hebrews during the first stage of their history. God was present in the life of the patriarchs, symbolically “accompanied” them during the suffering in Egypt, and protected them in the desert. He launched 10 plagues against the Egyptians, allowing the Hebrews to escape slavery. He revealed to them the Ten Commandments, which would make coexistence possible and lead to human solidarity. 

It was a long period of “light,” the source of which was the Creator. Our chapters begin in a different period. The “light” coming from God would no longer be apparent, just as in the previous stage. They would have to learn that there is another “light,” the energy that comes from self-effort. They had received the instruction represented by the Mitsva, the legacy of behavior attached to the Word of God contained in the Torah. With this Torah in hand, would they be able to generate an inner “light” of their own from now on? 

The report of the explorers and the next rebellion led by Korach are episodes that reflect the anxiety, and the uneasiness of having to make their own decisions without a celestial “cloud” to indicate each step to follow. The path that the Hebrew people will follow will be uncertain but sobering. Each challenge will be instructive, allowing us to take a step towards national maturity, worthily represented in our days by Medinat Israel.

MITSVA: ORDINANCE OF THE TORAH IN THIS PARSHA

CONTAINS 2 POSITIVE MITSVOT AND 1 PROHIBITION

  1. Numbers 15:20 Separate Challah from all mass and deliver it to the Kohen.
  2. Numbers 15:38 Place Tsitsit (fringes) on a dress that is dressed.
  3. Numbers 15:39 Do not deviate into the thoughts of the heart or what the eyes see.

NUESTROS DIEZ MANDAMIENTOS

SHAVUOT

La fecha de Shavuot, Zemán Matán Toratenu, el otorgamiento de la Torá fue fijado para el 6 de Siván, día cincuenta del Ómer que se empieza a contar desde el segundo día de Pésaj. La fecha de la festividad produjo una fisura en el pueblo judío, porque los Zedukim (saduceos) opinaron que Shavuot debe celebrarse el primer domingo después de Pésaj. Por lo tanto, durante algunos años la totalidad del pueblo judío no siempre celebraba esta festividad el mismo día. Si tomamos en cuenta que la Torá es el rasgo fundamental que caracteriza y diferencia al pueblo judío, comprenderemos por qué el conflicto produjo una fisura básica.

La lectura de la Torá del primer día de Shavuot incluye la frase: “Y seréis para Mí un reino de Kohanim y un pueblo sagrado”, imperativo que obliga a trascender por encima de las necesidades materiales y dedicar el mayor esfuerzo, tanto intelectual como emocional, para elevar lo que es material y cotidiano y transformarlo en una acción espiritual. Cada persona debería construir una escalera que una tierra y cielo, según el sueño del patriarca Yaacov, para alcanzar su potencial individual, simbólicamente representado por su imagen individual celestial.

Una de las funciones principales del Kohén era la educación. Por lo tanto, formar parte de Mamléjet Kohanim, “unreino de Kohanim”, implica la actividad intelectual, Lilmod ulelamed, “estudiar y enseñar”. La segunda parte de la frase exhorta a formar parte del Goi kadosh: un pueblo sagrado, que según la interpretación clásica de Rashí quiere decir “permanecer aparte” y no dejarse seducir por las acciones de otros pueblos que en ocasiones sucumben a la tentación y derriban en lainmoralidad. El Kohén Gadol llevaba la inscripción Kódesh LaShem, “santificado para Dios”, sobre un objeto que portaba en su frente. De tal manera que Kohén y Kadosh son conceptos afines que forman parte del norte espiritual de todo el pueblo judío, según el versículo citado.

El tema central de la lectura bíblica es indudablemente Aséret HaDibrot: los Diez Mandamientos, listado de imperativos que se han convertido en la “Carta Magna Espiritual” de gran parte de la Humanidad. Tal como sucede con muchas grandes obras y textos memorables, el paso de los años confirma su vigencia. Con un lenguaje sobrio, sin equívocos, trata los temas fundamentales de la sociedad, empezando con la intervención divina en contra de la esclavitud egipcia que proclama el derecho natural del hombre a la libertad, condición sagrada que nunca que debe ser comprometida. La pureza de la fe en un solo Dios no puede ser comprometida con la idolatría que no se circunscribe a una efigie de piedra u otro material, sino que incluye el culto al poder o a la moneda, entre otros.

La utilización de la segunda persona del singular para cada uno de estos Mandamientos implica que la sociedad es el cúmulo de sus integrantes y que nadie está exento del cumplimiento de estas ordenanzas, hecho que se desprende de una antigua tradición que afirma que todas las almas, incluyendo las que nacerían en el futuro, estuvieron presentes en la revelación que se produjo en el monte Sinaí. Esta revelación de la Voluntad Divina fue el momento estelar de la historia del pueblo judío, porque sentó las bases morales y éticas que servirían de brújula para el futuro desarrollo de la Humanidad.

OUR TEN COMMANDMENTS

SHAVUOT

The date of Shavuot, Zeman Matan Toratenu, the bestowal of the Torah, was set for the 6th of Sivan, the fiftieth day

 of the Omer that begins a count from the second day of Pesach. The holiday date caused a fissure in the Jewish people because the Zedukim (Sadducees) opined that Shavuot should be celebrated on the first Sunday after Pesach. Therefore, the Jewish people did not always celebrate this holiday on the same day for some years. Considering that the Torah is the fundamental feature that characterizes and differentiates the Jewish people, we will understand why the conflict produced a basic fissure.

The Torah reading on the first day of Shavuot includes the phrase: “And you will be for Me a kingdom of Kohanim and a sacred people,” an imperative that forces us to transcend material needs and devote energy and effort, both intellectual and emotional, to elevate what is material and every day and transform it into spiritual action. Each person should build a ladder that unites earth and heaven, according to the dream of the patriarch Yaacov, to reach his potential, represented by his heavenly image.

One of the main functions of the Kohen was education. Therefore, being part of Mamlechet Kohanim, “a

Kingdom of Kohanim” implies the intellectual activity, Lilmod ulelamed, “to study and teach”. The second part of the phrase exhorts to be part of the Goi kadosh: a sacred people, which according to the classical interpretation of Rashi means “to stand apart” and not to be seduced by the actions of other peoples who sometimes succumb to temptation that leads into immorality. The Kohen Gadol bore the inscription Kodesh LaShem, “sanctified unto God,” on an object he carried on his forehead. In such a way that Kohen and Kadosh are related concepts that are part of the spiritual north of the entire Jewish people, according to the verse quoted.

The central theme of the biblical reading is undoubtedly Aseret HaDibrot: the Ten Commandments, a list of imperatives that have become the “Spiritual Magna Carta” of much of humanity. As with many great works and memorable texts, the passing of the years confirms its validity. With sober, unequivocal language, it deals with the fundamental issues of society, beginning with divine intervention against Egyptian slavery that proclaims man’s natural right to freedom, a sacred condition that should never be compromised. The purity of faith in one God cannot be tainted with idolatry that is not limited to an effigy of stone or other material but includes the cult of power or materialism, among others.

The use of the second person singular for each of these Commandments implies that society is defined by its members and that no one is exempt from compliance with these ordinances, a fact that follows an ancient tradition that states that all souls, including those who would be born in the future, were present in the revelation that occurred at Mount Sinai. This revelation of the Divine Will was the crowning moment in the history of the Jewish people because it laid the moral and ethical foundations that would serve as a compass for the future development of humanity.

LA HUMILDAD INDISPENSABLEPARA EL ESTUDIO DE LA TORÁ

BEMIDBAR_NÚMEROS I:1-IV:20

La Torá fue entregada en el desierto, la tierra de nadie, y desde un monte de mediana altura, sin aparente distinción. De este hecho, los Jajamim concluyen que el estudio de la Torá exige modestia y humildad. El falso y exagerado orgullo es enemigo mortal del aprendizaje. Incluso Rambam, quien en todo momento aconsejó el Shevil Haemtsaí, el sendero medio que evita los extremos insistió en que no existe un término medio en el caso de la modestia. No puede concebirse una modestia media o parcial, porque sólo la persona que ha adquirido un cúmulo de conocimientos reconoce necesariamente la vastedad de lo que aún le queda por conocer, que es como un horizonte que se aleja no obstante la distancia recorrida. Únicamente quienes tienen conocimientos parciales que siempre son insuficientes se jactan de sus logros intelectuales. El auténtico erudito sabe que no sabe y está sediento de estudio y reflexión.

Aún no se ha logrado identificar definitivamente al Har Sinai que fue testigo de la revelación de la voluntad Divina. El desconocimiento del lugar conduce a valorar la palabra y el mensaje que allí fueron enunciados, sin la tentación de “santificar” el lugar. El mensaje constituye el único elemento sagrado de aquella extraordinaria experiencia de hace más de 3,000 años.

El nombre de este cuarto libro de la Torá que nuestros capítulos inauguran significa “en el desierto”, especie de vaticinio de que el hombre permanecería espiritualmente en un desierto por un extenso lapso. Mientras que en el campo de la tecnología los avances crecen exponencialmente, en el terreno espiritual hay avances y retrocesos continuos que, debido a la excelencia tecnológica, convierten las recaídas, en cada instancia, en una mayor amenaza para la supervivencia de la especie humana.

La cualidad de la humildad conduce a la tolerancia–especialmente de las ideas que son diferentes– y el respeto de una conducta alterna que también se sustenta en los principios de la ética y la moralidad, los cuales no agreden, sino que respetan al prójimo. Aquellos que alegan que son los poseedores de la verdad única y absoluta, muchas veces son presa del fanatismo y fundamentalismo que invariablemente produce la intolerancia, y ésta, a su vez, se traduce en agresión física.

La arrogancia de quienes “han visto la luz” impide que admitan la justicia y la verdad, porque su interés se centra en la gloria y el poder personal. Esta arrogancia es el enemigo mortal del estudio de la Torá, que exige la humildad ante el “Intelecto Supremo” de Dios. Meod meod hevé shefal rúaj, exige el Talmud, porque la humildad es un requisito para el crecimiento espiritual. 

Entre los posibles calificativos que la Torá podría haber escogido, Moshé es designado como anav mikol adam, “el más humilde entre los humanos”. Por ello, en la tradición oral es conocido como Moshé Rabenu, “nuestro maestro Moshé”, porque la humildad es condición sine qua non en el proceso del aprendizaje y la enseñanza.

Estos capítulos se leen generalmente en la víspera de la festividad de Shavuot que celebra el aniversario del otorgamiento de la Torá. Se debe destacar que esta festividad no tiene fecha en las Escrituras: sólo el conteo de 49 días, que son 7 semanas, desde el segundo día de Pésaj, identifica su celebración. Shavuot es anticipado durante estos días, hecho que condujo a algunos sabios a opinar que la preparación es muchas veces más importante que la celebración. 

Anticipar el evento trae consigo mayor regocijo que el momento de la festividad. De manera similar, el estudio de la Torá es un proceso, no es un evento. Tal como el desierto no reconoce el pedigrí ni los privilegios, porque todos tienen que luchar igualmente para sobrevivir en ese ambiente hostil, la Torá no es adquirida por herencia, no reconoce los privilegios ancestrales. El estudio de la Torá es, en realidad, una manera de conducir la vida con un norte que apunta al aprendizaje, el cual sólo puede lograrse bajo la premisa de la humildad ante la eterna sabiduría del Creador.